¡De explicando a demonstrando!
Joel 2.28
Aquí estoy en Athens con el equipo de planificación de la conferencia y juntos estamos finalizando las logísticas necesarias en preparación para la Conferencia Anual del Norte de Georgia. ¡Qué alegría tenemos cuando nos unimos con otras Metodistas Unidas para alabar a Dios y realizar el trabajo de la Iglesia!
Esta Conferencia Anual nos une para celebrar todo lo que Dios ha hecho a través de nosotros durante el año pasado. Premiamos a algunas iglesias por vitalidad, compartimos historias acerca de cómo Dios ha obrado a través de iglesias locales, clérigos, y laicos.
Participaremos en devocionales, cultos y servicios de alabanza, vamos a compartir la Santa Cena, y celebraremos la comisionamiento y ordenación de nuevos líderes. Y no se nos puede olvidar, que también vamos a tener presente los y las Santos Queridos y Queridas que ya se han reunido con la iglesia triunfante.
Nos tomamos el tema de este año del profeta Joel.
Hemos decidido usar este texto de Joel como tema de la Conferencia Anual porque el Profeta Joel da un mensaje de esperanza a un pueblo que desesperadamente necesita esperanza.
El tema más resaltante del libro de Joel es RESTAURACIÓN. Después de que las langostas se abalanzaron y se lo comieron todo, después de que la sequía ha secado la tierra, después de que la hambruna ha matado de hambre a muchos, aquellos que sigan con vida no tienen nada más por hacer que lamentar. Y en el segundo capítulo, en medio de desesperanza y problemas, viene una gran momento crucial…¡Dios nos escucha y Dios viene!
Joel comparte el mensaje de Dios diciendo, derramaré mi Espíritu sobre toda carne … ¡Oye, mi gente: sobre toda la carne! ¡Toda significa toda!
Todo significa que Dios, el creador de toda la carne, puede hacer lo que el creador quiere hacer con toda la carne. Tomemos un momento para recordar lo que hizo el Dios de toda la creación en el valle de los huesos secos. Ustedes y yo no podemos ser carne sin otra carne.
Mi humanidad está ligada a su humanidad, y visa versa. Dios derrame su Espíritu Santo porque Dios sabe que el Espíritu Santo nos ayudará: a reconocer y honrar a la diversidad re razas, generos, y etnias presentes entre nosotros y a amar y celebrar la hermosura se encuentra en nuestras diferencias.
Lo podemos hacer. Somos el pueblo de Dios creados en la imagen de Dios.
Estamos parados en el precipicio de una temporada nueva. Una temporada nueva que llama ustedes y a mi a transicionar de explicando el evangelio a demostrando el evangelio. Dios derramo el Espíritu Santo. Tal como Dios derramo el espíritu sobre Cristo cuando se ha ido a la sinagoga y abrió el rollo y explicó a todos presentes: «El Espíritu del Señor está sobre mí, porque me ha ungido para llevar la Buena Noticia a los pobres. Me ha enviado a proclamar que los cautivos serán liberados, que los ciegos verán, que los oprimidos serán puestos en libertad, y que ha llegado el tiempo del favor del Señor».
El día de Pentecostés, Pedro tuvo que explicar a los críticos que estaba pasando en el aposento alto. No estaban borrachos. ¡El Espíritu Santo venía sobre ellos como un viento soplante, y ellos recibieron poder y la iglesia nació!
Cuando esta nueva manifestación del Espíritu Santo ocurrió, los y las presentes no necesitaban una explicación teológica. Sabían que lo que había ocurrido en el pasado, ya estuvo ocurriendo en el presente. El antiguo se convirtió en el nuevo. La gente despertó, y fue conscientes que el Espíritu estaba obrando en su mundo. Estos seguidores de Cristo demostraron el poder del Espíritu Santo para cambiar vidas y comunidades.
Como metodistas unidas, siempre estamos explicando el qué y el porque de lo que creemos cuando nos reunimos en estudios Bíblicos, grupos de discipulado, grupos pequeños, clases de confirmación, y grupos de contabilidad. ¡Es posible que ya sea la hora para demostrar lo que creemos!
No queremos sólo explicar cómo Jesús y los discípulos sanaron a los enfermos, ustedes y yo hay que salir ahora mismo a visitar a los enfermos y poner las manos sobre ellos.
No solo explicamos la victoria en Jesús, tenemos que salir por la puerta y caminar en victoria.
No solo explicamos que la biblia nos instruye a amar al prójimo, hay que ir a amar a alguien que no nos cae bien.
Estoy hablando de un evangelio demostrativo. Realizamos este ministerio, demostramos y vivimos este evangelio, porque el Espíritu Santo nos impulsa a hacerlo. El Espíritu Santo es la fuente vital de todas las actividades de la iglesia.
Amigos y amigas, cuando no estamos abiertos al movimiento del Espíritu Santo, cuando no estamos guiados por el Espíritu Santo, somos solamente un sistema religiosa sin poder, desesperadamente buscando una bala mágica que no existe para poder crecer nuestra iglesia. La fe se trata de un Dios que vive en ustedes y en mí que nos da un poder nuevo: un poder que nos mueva a vivir conectados el uno con el otro para fortalecer, servir, y crecer el cuerpo de Cristo.
Cuando nos reunimos en Athens, Georgia, mi oración fervorosa es que Dios visitará a la iglesia de Dios, derramando su Espíritu Santo sobre toda carne para que seamos unidos en el Espíritu, unidos en Cristo Jesús, y que nada nos distraerá de nuestra misión y visión verdadera.
Que sea así en su vida. Que sea así en la mia. Amén.